Fue un camino largo, lleno de dificultades y obstáculos, pero también lleno de esperanza y sed de vida. Afortunadamente, esta aventura tuvo un final feliz. Hace dos meses, Christos-Efrem, el niño de la ciudad de Thessaloniki, ganó la batalla contra el cáncer y volvió a casa. Después de numerosas y dolorosas rondas de quimioterapia, el pequeño fue sometido con éxito a un trasplante de hígado. Su cuerpo no rechazó el órgano trasplantado, mientras que su recuperación transcurrió sin problemas. Después de estar hospitalizada durante varios meses en Palermo, la familia regresó a Grecia, donde Christos-Efrem deberá ser sometido con frecuencia a diversas pruebas por precaución, en un hospital público. Nos gustaría agradecerles amablemente a todos ustedes por estar al lado de esta familia, apoyándolos durante esta terrible experiencia.
¡Feliz cumpleaños, pequeño! ¡Le deseamos sinceramente una larga vida, llena de salud y felicidad! ¡Tu sonrisa calienta nuestros corazones y nos da la esperanza de un mundo mejor!